El año 2022 tiene varias fechas clave que podrán a prueba la gestión de la reforma laboral por parte de la Secretaría del Trabajo y del Centro Federal de Conciliación y Arbitraje.

La primera tendrá que ver con la elección del secretario general del sindicato petrolero (STPRM) a realizarse el 31 de enero.

Previo a esta jornada se dieron las votaciones seccionales del mismo sindicato, donde se señalaron múltiples irregularidades y se deberá reponer el proceso en cuatro secciones.

También se deberá demostrar la eliminación de la subcontratación en la administración pública.

“A partir de enero terminan los contratos en el sector público. Algunas dependencias sacaron licitaciones de servicios especializados, pero en contratos que están terminando a la gente se le está ofreciendo trabajar por honorarios”, dijo Héctor Márquez, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano.

Añadió que no hay certeza de cuántos trabajadores se contratarán de manera directa en las dependencias y a quiénes se les ofrecerá otro esquema.

En mayo deberá implementarse la tercera fase de la reforma laboral, para instaurar un nuevo modelo de justicia laboral con la operación de centros locales de conciliación y tribunales laborales, en lugar de juntas locales que seguirán operando pero sólo para abatir el rezago de expedientes.

Por otro lado, se espera que a mediados de año se concrete una NOM sobre teletrabajo, para que la aplicación de la ley sea más clara y los empleadores otorguen apoyos a sus colaboradores.

Culmina proceso

En 2022 deberá terminar la implementación de la reforma laboral con la puesta en marcha del nuevo modelo en los estados que conforman la última fase de aplicación.

· Los estados que conforman la tercera etapa son Chihuahua, CDMX, Coahuila, Jalisco, Michoacán, Nayarit, NL, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Yucatán.

· Autoridades federales y locales trabajarán de manera coordinada en la implementación de la reforma para así concluir en tres años el nuevo modelo.

· En 2022 deberán arrancar operaciones los centros de conciliación y los tribunales laborales en los estados de la tercera fase.

· Las juntas locales de conciliación seguirán laborando sólo para abatir el rezago de casos.

Fuente: STPS