Un lí­der que di­ce lo que pien­sa, que cues­tio­na to­do y que es­tá en cons­tan­te cam­bio sa­be adap­tar­se y afron­tar los pro­ble­mas ante un mundo en constantes cambios y donde las problemáticas se pueden presentar de un día para otro, se requieren líderes incómodos, líderes que sean resilientes y sepan manejar los problemas.

Pero ¿cómo es un líder incómodo? Mario Elsner, especialista en liderazgo y fundador de Business Game Changers, destaca que estas personas buscan salir de la zona de confort y enfrentar la incomodidad que viene con el crecimiento y la innovación. Además, se atreven a ser diferentes, a desafiar las expectativas y generar un impacto significativo en el entorno.

“Necesitamos de estos líderes que sepan vivir en la incomodidad, para que se puedan adaptar más rápido a estas crisis. Yo lo defino como un líder incómodo, que termina siendo un estilo de vida y una mentalidad”.

Mario recuerda que lo consideraban problemático por preguntar constantemente y siempre querer ir más allá, pero fue esta actitud la que lo hizo crecer y liderar diversos equipos en Energizer, donde se desempeña como director de negocios para Latam Norte.

Desarrolla líderes incómodos

Mario precisa en que las organizaciones necesitan buscar y desarrollar este tipo de líderes, con un ADN de resiliencia, porque “vamos a necesitar talentos que se vuelva líderes en la incomodidad, que sepan cómo actuar, que rompan el estatus quo, que sean muy auténticos”.

Un informe de Mckinsey señala la importancia de desarrollar equipos preparados para enfrentar con resiliencia los retos del futuro. Por eso, es vital formar equipos con líderes incómodos, aquellos dispuestos a cuestionar el status quo y a pensar de manera innovadora para encontrar soluciones a los desafíos más complejos.

Para desarrollar este talento, el especialista indica que lo primero que hay que hacer es identificarlo y no etiquetarlo como incómodo, porque el líder incómodo todo el tiempo está proponiendo, le gustan los retos y es inquieto, lo importante es canalizar esa energía en proyectos.

Además, la autenticidad juega un pape l m uy im po r ta nte, porque el líder defenderá lo correcto, los valores y va a opinar, pero no como excusa, sino con propuestas.

“Ser fiel a uno mismo y a sus valores, incluso cuando eso signifique enfrentar la oposición o la crítica, es esencial para liderar con integridad y generar confianza en los demás. Los líderes auténticos inspiran a sus equipos y construyen relaciones sólidas basadas en la confianza mutua y el respeto”.

Las habilidades del líder incómodo

Mario destaca los “superpoderes” que los líder incómodos deben tener, pues ello les ayudará a superar los problemas y fortalecer el negocio.

La resiliencia es la habilidad más importante que debe tener un líder, pues ante constantes cambios el directivo requiere la habilidad de afrontar los problemas y buscar soluciones.

Otra de las habilidades es la colaboración, debido a que se requiere un trabajo en conjunto, y crear equipos más unidos, así como saber discutir, pues cuando hay un problema es importante tener discusiones constructivas y no agredir.

La adaptabilidad también es importante, puesto que los líderes requieren reinventar y crear mejores procesos. “No esperar a que te atropelle la necesidad. Hoy los líderes se tienen que incomodar cuando no lo necesitan. Se dice que se tiene que ser el primero, yo no creo eso, yo creo que se tiene que ser el que llega temprano a las cosas, porque cuando llegas temprano estás en el momento adecuado”.

Ser analíticos y entender las causas de las cosas también es un súper poder, por ejemplo, cuando bajan las ventas ir a la causa y solucionar el problema de fondo. De esta forma se deja de ser reactivo para transformarse en un líder proactivo. “Entender los problemas desde la causa es importante para ser un líder incómodo”.

10 superpoderes de un líder incómodo

Un líder incómodo no es una persona problemática, sino aquella que sabe sobrellevar las crisis y afrontar los problemas para llevar el negocio al siguiente nivel.

1. Desafía lo establecido: Sale de su zona de confort y busca hacer las cosas diferente.
2. Resiliencia: Sabe enfrentarse a la incertidumbre y sobreponerse ante las crisis.
3. Es analítico: Analiza el trasfondo de los problemas y busca soluciones de raíz.
4. Cuestiona todo: Le gusta preguntar y constantemente cuestiona todo y a todos, además busca aprender cosas nuevas.
5. Promueve diversidad: Sabe que un equipo diverso ve las cosas desde diferentes perspectivas.
6. Autenticidad: Defiende sus valores, ideas y siempre es autentico.
7. Asume su responsabilidad: No suele culpar a los demás o buscar excusas, sino que acepta su responsabilidad.
8. Comunicación directa: Le gusta hablar de frente y mantener conversaciones directas con los colaboradores.
9. Sabe manejar los conflictos: Cuando se presentan los problemas opta por tener discusiones constructivas y no agredir.
10. Genera ambientes de confianza: Crea ambientes donde los colaboradores se sientan con la confianza de expresar sus ideas.   Los ejecutivos requieren identificar el talento y no tacharlo de incómodo, sino canalizar su potencial en nuevos proyectos.

“Hoy los líderes se tienen que incomodar cuando no lo necesitan”. Mario Elsner, FUNDADOR DE BUSINESS GAME CHANGERS.

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