El Centro Federal de Conciliación ha rechazado solicitudes de gremios de trabajadores que quieren agruparse como un sindicato, porque tienen el carácter de ser informales.

Alfredo Domínguez Marrufo, director del organismo, afirmó que debe hacerse el análisis de los datos aportados por estas agrupaciones para otorgarles un registro, sin embargo, han abundado las solicitudes de taxistas, comerciantes y boleros, entre otras actividades.

“La mitad de los rechazos que estamos haciendo de registrar nuevos sindicatos tienen que ver con sindicatos que no están dentro de la economía formal, son sindicatos de taxistas, boleros, tianguistas, comerciantes, de sindicatos que hacen acarreos, donde no tenemos la presencia de un empleador y son otro tipo de figuras”, externó.

En ese sentido señaló que estas agrupaciones se acogen a la figura del sindicato porque es una forma de conseguir prerrogativas por parte de gobiernos estatales y municipales.

“Nosotros no podemos otorgar el registro porque necesitan tener una relación de subordinación con un empleador, porque si no, son clubes sociales, asociaciones civiles o cooperativas o asociaciones de solidaridad social porque no tienen a un empleador.

“Pueden ser transportistas incluso, estos hombres-camión, porque no tienen frente así un empleador, porque ellos mismos son sus propios patrones. Es una forma de que se coaligan, se asocian para conseguir permisos o concesiones, por parte de las entidades federativas”, explicó.

Para registrar a un nuevo sindicato, el Centro Federal pide una serie de requisitos como acta constitutiva de la asociación; nombre y domicilio del patrón; padrón de asociados y datos de afiliación a federaciones o confederaciones, si fuera el caso.

Esta serie de requisitos acota las posibilidades de las agrupaciones que quieren constituirse como un sindicato, opinó Germán de la Garza, socio de Deloitte.

“Los registros que se han venido rechazando tienen que ver sobre todo con una serie de requisitos formales que está solicitando el Centro Federal, que son bastante rígidos, y en ese sentido, va a ser difícil que organizaciones que pretendan coaligarse en un sindicato logren obtener este registro, dado que no es sencillo cumplir con los requisitos de forma.

“Si bien es cierto constituirse como un sindicato había sido complejo en el País, ahora va a ser más complicado y eso va a ir delimitando quiénes son los sindicatos que van a tener una presencia en el mercado laboral”, subrayó el experto de Deloitte.