La Comisión Nacional para los Salarios Mínimos (CONASAMI) acordó por mayoría, incrementar el salario mínimo en México a razón de un 15% a partir del primero de enero del 2021, para quedar entonces en la frontera norte a razón de $213.39 pesos por día (USD10.60 dólares) y en $141.70 (USD 7 Dólares) diarios para el resto del país.
Este incremento justo e histórico, se da en medio de un dilema complejo entre economía y salud, de un lado parece el peor año en la historia moderna del país para corregir una injustica de más de cincuenta años y del otro, una hipoteca social por la deuda histórica de México con los trabajadores.
Aquí algunos aspectos que hubieran sido valiosos considerar para la decisión aislada que se tomó en días pasados respecto de este incremento.
1) Conforme datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) hasta agosto pasado, el 63% de las empresas declaraban no poder soportar los bajos niveles de ventas en los siguientes 12 meses. Además, entre 2019 y 2020 han desaparecido un millón once mil empresas (o sea que tenemos un millón menos de empleadores)
2) Se han perdido 750 mil puestos de trabajo formales hasta noviembre pasado.
3) La tendencia de personas que reciben un salario mínimo como retribución se ha incrementado en un 60% entre 2018 y 2020 si esta tendencia continúa, el mercado laboral estará precarizado a niveles del 50% en un par de años. En otras palabras, si esta tendencia se mantiene, 50% de los trabajadores formales recibirán un salario mínimo hacia el 2023. Hoy el 24% de la población ocupada recibe un salario mínimo.
4) El salario mínimo mensual a partir del 2021 será de $4,251 pesos mexicanos y la canasta urbana alimentaria para tres personas cuesta hoy $4,980.84 (Ver gráfico 1) como puede apreciarse, el salario mínimo aún con este aumento, sigue sin alcanzar para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos como reza la Constitución.
Gráfico 1.
Propuestas
(a) El Salario mínio debe ir acompañado de otros cambios como un (i) programa que apoye la conservación de empleos formales en los próximos doce meses comprobable con las bajas del IMSS y (ii) reuniones semestrales o trimestrales de la CONSAMI para revisar empleo, salario y pobreza laboral y en función de la volatilidad ir reorientando y ejecutando acciones y políticas en la materia.
(b) Continuar con el proceso de recuperación del salario mínimo y no perder lo ganado en los últimos cuatro años; la experiencia histórica demuestra que los incrementos reales al mínimo no son inflacionarios ni alteran otras variables económicas (ver gráfico 2)
Gráfico 2.
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