El teletrabajo, que hace un año se aseguraba había llegado para quedarse, al día de hoy permanece solo a medias ya que muchas empresas de diversos sectores han llamado a sus empleados a regresar a sus puestos adoptando un modelo híbrido, aquel que conjuga trabajo remoto con el presencial, dispuestas a experimentar este modelo aunque finalmente no sea el definitivo.
Fuentes consultadas por Radar Laboral dibujan un panorama muy diverso en el teletrabajo, en aquellos sectores en los que sea viable, el teletrabajo se consolidará “respondiendo a razones diversas como la productividad, la conciliación, incluso dando respuesta a problemas como el cambio climático y la despoblación”, pero también prevén que la mayoría de las empresas y de las personas elegirán combinar ambos esquemas “por el indiscutible valor que tiene el trabajo presencial como elemento de socialización y de fomento del trabajo en equipo”.
Esta fórmula laboral combinada gusta a las compañías más que el teletrabajo de tiempo completo y también parece la preferida por la mayoría de los empleados, ya que si bien muchos colaboradores se encuentran cómodos con el home office debido a los ahorros en tiempo y dinero (un aspecto cada vez más cuestionado y que se ha tratado de solventar con la reforma a la Ley Federal del Trabajo), la mayoría de los empleados prefiere un modelo híbrido, con flexibilidad de elección, eso sí, de los días en los que se trabaja desde casa u oficina, según concluye.
Un modelo lleno de claroscuros
El gran temor de las empresas cuando se trata de teletrabajo, son las consecuencias en la productividad ya que el rendimiento puede variar mucho según el sector. La interacción con las personas favorece la generación de ideas, imprescindible para la innovación, además de que la conexión e identificación con el equipo también impacta en el rendimiento de los trabajadores, por lo que podría verse afectado.
Según una encuesta de la empresa de software de recursos humanos Personio, buena parte de los empleados admiten una reducción de la productividad de hasta el 30% como consecuencia del teletrabajo. “Uno de cada tres señala al agotamiento, burnout en inglés, como la principal causa, el 28% culpa a los bajos niveles de motivación, uno de cada cuatro al escaso bienestar físico o mental y casi uno de cada cinco a la fatiga del Zoom.”
Si este nuevo entorno híbrido se entiende y somos capaces de aprovecharlo, ganamos todos. La compañía identifica ahorros importantes en infraestructura, desplazamientos de personas y flexibilidad, así como el trabajador mejora sus niveles de conciliación, ahorra en comidas, transportes y alojamiento.
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