¿Cómo sortear la maldición del sucesor?
En las empresas familiares, la figura del fundador suele ser un tótem al que se rinde pleitesía generación tras generación. La tradición oral suele agrandar su figura hasta elevarla casi a la condición de leyenda. Hechos contrastados, salpimentados con no pocas dosis de invención. Si a uno le toca suceder al frente del negocio al pater familias, el camino a seguir seguramente no será fácil. Desde el principio tendrá que aprender a convivir con la comparación con el fundador. Andrew Keyt sostiene en Mitos y Mortales (LID Editorial) que el éxito de los fundadores parece haberse logrado por arte de magia, cuando en realidad también tuvieron que trabajar duro y sufrieron sinsabores. En su libro, este consultor ofrece claves para que aquellos que heredan la empresa puedan aprovechar lo mejor de sus antecesores y también puedan labrarse su propio camino. Y es que una compañía sostenible en el tiempo no puede vivir permanentemente del recuerdo de sus comienzos. Las organizaciones que perduran son aquellas que, generación tras generación, logran adaptarse al mundo que les ha tocado vivir.

